¡Mantente aquí y ahora!

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Mientras más corres hacia la meta, más te pierdes a la vida misma.

Una persona que está constantemente preocupada por sus metas nunca será capaz de disfrutar de su vida. Vive en el futuro e ignora el presente. Cuando estamos en el momento presente, el aquí y ahora, no necesitamos una meta que nos guíe.

Sólo la conciencia del momento presente nos ayudará a decidir lo que hay que hacer en cada momento. Cuando atiendes el momento presente con conciencia, el futuro se arregla por su cuenta. Siempre y cuando tu camino sea justo, llegarás a tu destino correcto. No necesitamos definir el destino, el camino correcto define su propio destino.

Sin embargo, nos preocupamos constantemente por el futuro. Constantemente pensamos en el pasado, lo relacionamos con el futuro y definimos nuestras expectativas sobre lo que hemos perdido en el pasado, o lo que creemos que nos dará la felicidad en el futuro.

Por ejemplo, cuando estás estudiando piensas: "Cuando tenga un trabajo, voy a ser feliz”. Cuando tienes trabajo piensas: “Después de casarme, mi vida será feliz”. Después del matrimonio, uno piensa: “Cuando tenga hijos y casa, voy a ser feliz". Después de tener hijos y ser propietario de tu casa piensas: “Cuando los hijos crezcan y todas mis responsabilidades hayan terminado, voy a ser feliz”. En el momento en que tus hijos crecen, tus responsabilidades terminan, cuando quieres relajarte, ¡estás tan condicionado a la ejecución que no puedes relajarte!

Con esta actitud mental, nosotros estamos constantemente corriendo para permanecer en el mismo lugar. La felicidad es donde estamos. No es donde pensamos que debemos estar.

- Extracto del libro El Bhagavad Gita Demistificado por Paramahamsa Nithyananda, Capítulo 3, Mensajes - 61

Aprende más con los vídeos del Paramahamsa Nithyananda:
www.youtube.com/nithyanandaenespanol